Depresion, Ansiedad y Pánico: Al FUEGO de la CONSCIENCIA

Tengo Diagnostico desde hace más de 30 años. “Sufrí una intolerable, cruel e inhumana crisis de DEPRESION, ANSIEDAD y PANICO durante 1 año, en el periodo 2004, no podía soportarla, nadie podía ayudarme, ni el Psiquiatra, ni los Medicamentos estando hospitalizada (me daban 25 pastillas diarias y muchas 18 gotas de clonacepam), ni las Terapias, ni el Sacerdote, ni el Pastor, ni el Brujo, ni medicamentos Homeopáticos, ni Acupuntura, ni el Alcohol podían hacerme recuperar la paz… (algunos fueron indolentes en mi desespero por recuperarme) por lo cual tomé la decisión de suicidarme. Llamé a mi familia para despedirme y no encontré apoyo, ellos pensaban que era falta de carácter, debilidad personal, que me faltaba fuerza de voluntad, que me faltaba verraquera para enfrentar la vida, que “Dios me estaba castigando”, que yo estaba manipulando y llamando la atención…. no entendían lo que estaba viviendo, se sentían avergonzados de mi y se apartaron. Mis crisis iniciaron cuando tenía 18 años, pero realmente se incubó desde la infancia, ya tenía personalidad depresiva, a los 7 años, pensaba como suicidarme, ante tanta soledad, por el abandono de mi padre así como de mi madre (no fue intencional), quien tenía que trabajar arduamente para sacarnos adelante. Al principio no sabía de qué se trataba, pensé que me estaba volviendo “loca”, las crisis entre leves y moderadas, iban y venían, no sabía cómo ayudarme, ni que hacer. De los 18 a 31 años relativamente manejaba las crisis, pero cada día, iba creciendo la enfermedad, aparecían nuevos síntomas, y los que ya tenía, se intensificaban. A mis 32 años me dió una crisis fatal, me dio depresion mayor, ansiedad y ataques de pánico constantes, durante un año, estuve hospitalizada, 8 veces, ese año 2004. Solo recibía medicamentos y permanecía dopada, esperaba encontrar la “pastilla mágica”. Todo el tiempo rogaba a los psiquiatras, que me ayudaran, y solo me respondían “en 1 mes los medicamentos van a hacer efecto” pasaba el mes, y luego me decían que esperara 3 meses, 6 meses…. Para que obraran y nada pasaba…

La crisis del 2004, se dió porque mi esposo, se mostró tal cual era, después de 3 años de convivencia, resultó que era alcohólico, adicto al sexo, le gustaban los chicos, los travestis, las prostitutas y consumía sustancias psicoactivas, era neurótico y muy agresivo. Él nunca trabajó, vivió de las herencias de los padres, al principio, de la relación se mostró como todo un caballero, era jugador de golf, y no la pasábamos en diferentes clubes de golf, en la semana, viviendo una vida muy cómoda. En 2003, ante una posible quiebra decidió “montar” un bar de prostitutas” y yo me iba volviendo loca, todos los días tomaba, llegaba entre las 4am y 2pm del otro día, completamente drogado y alcoholizado. Fui víctima de abuso sexual, psicológico y físico, así se fue manifestando más, la enfermedad y volviéndose insoportable. Era tanto el sufrimiento que sentía, que a veces pensaba en hacerle daño o matarme, para acabar con todo. Así terminé en la clínica. Él no me dejaba hospitalizar por el “miedo al que dirán”. Yo me hospitalizaba sola, y toda mi familia se me venía encima. Cuando estaba en la casa, el me golpeaba por estar en crisis, me decía que las “prostitutas llevaban una vida mucho más difícil y que a ninguna le daba depresion y que yo, que tenía todo, resultaba con esas bobadas”. Este fue el detonante.

Las causas de mi enfermedad iniciaron desde pequeña, con el abandono de mi padre, la negligencia e indiferencia de mi madre quien me comparaba con mi hermana mayor, la consentida; Bullyng en el colegio; más adelante, la terminación de una relación amorosa: mi dependencia hacia la pareja, un excesivo miedo a que me abandonaran o traicionaran; miedo al rechazo de la gente; Carga laboral: el hecho de trabajar en lo que no disfrutaba; Muchas creencias religiosas me afectaron más, porque quería ser perfecta como Jesús, me daba mucha culpa no cumplir con todos los mandatos de la iglesia; durante muchos años no tuve relaciones sexuales porque no era casada: desde mis 20 a 29 años, me terminé volviendo asexuada, no podia sentir placer; no salía con personas que no fueran de la misma iglesia, y esto me afectó en el trabajo, porque no socializaba, no tomaba, no bailaba, no compartía y terminaron despidiéndome, además porque se me notaba mucho la ansiedad.  

Después de mi última hospitalización, fui donde la psicóloga y le dije “voy a salir de aquí y me voy a suicidar” ella empezó a roncar y me puse muy triste, de ahí Salí a la avenida caracas a comprar veneno para ratas, pero me preguntaban para que lo iba a utilizar y nadie me lo vendió, talvez, se veía en mi rostro, mis intenciones. Luego traté de lanzarme de un décimo piso, levanté mi pierna, solo me faltaba la otra, en ese momento se me vino toda mi vida en un segundo, solo la imagen de mi hija, hizo que no me lanzara. Luego supliqué de rodillas a mi Poder Superior, que me perdonara porque no podía seguir viviendo así, y lloré largas horas amargamente…. ya desgastada de tanto llorar, Tuve una EPIFANIA y empecé a CREER que un poder Superior a mi, podría ayudarme. Me llené de esperanzas y empecé a buscar otras herramientas para poder ayudarme, y en un mes y medio, no tenía ni uno, de los 28 síntomas que sufría, empecé a asistir a Terapias Psicológicas con Profesionales Especializados y con experiencia en Trastornos del estado del ánimo, iba al Gimnasio, hacia ejercicios de Respiración y Meditación, hacia Largas Caminatas, Yoga, me mantenía Activa trabajando todo el día, iba a Grupos de Apoyo, hacia Autobservación, escribía mis pensamientos distorsionados, Empecé a hacer Inventarios Diarios, a Servir a los demás. (Aprendí a “soltar”, A poner límites, A no sabotearme mi proceso de recuperación, A tener la mente abierta, A tener disposición y A dejar la victimización).

La Crisis del 2004 fue como una bendita bofetada, a mi constante autoconmiseración. Con la Psicoterapia, empecé a cambiar todas mis creencias irracionales: “que no valía nada, que nadie me quería, que era un estorbo, que la vida me había quedado grande, que no servía para nada, que era una víctima de las personas y las circunstancias, que yo no tenía poder para cambiar esas situaciones, que no iba a lograr nada en la vida, que no tenia la fuerza para separarme y salir adelante, que no merecía nada de la vida, que todo lo que me pasaba era un castigo de Dios y que me lo había ganado”…… aprendí a interpretar y percibir la vida de una manera diferente. Empecé a sentir nuevamente felicidad. Tuve que tomar decisiones y hacer cambios en mi vida, ya no soy la misma persona de antes…. fue un DESPERTAR DE CONSCIENCIA maravilloso!

A raíz de esta vivencia, y a través de la fundación que se creó en el 2007, realicé varias marchas y protestas ante el Congreso y el Ministerio de salud, para que se creara una “LEY que protegiera y garantizara los derechos de personas con Depresión y Ansiedad”, con el fin de que se prestara un mejor servicio, proveyeran medicamentos actualizados, se realizaran programas de Prevención y se concientizaran con el tema del Suicidio. A raíz de las movilizaciones, que fueron transmitidas en varios medios de comunicación, Canal Caracol, Canal RCN, CITYTV, Canal Capital…. recibí varias llamadas de políticos, que querían unirse conmigo para impulsar esta LEY. Trabajé durante cuatro años con la Representante a la Cámara Alba Luz Pinilla, en el Congreso de la Republica, e incluimos Asociaciones de pacientes con diferentes patologías mentales, creando y sustanciando una Ley general y no Particular. La LEY 1616-2013 ya es una Ley de la República, firmada por el Presidente de la República.

Al ver que la terapia psicológica era una excelente herramienta de recuperación, decidí estudiar psicología no solo para continuar ayudándome a mí misma, sino también, para orientar a otros. Ahora cada vez que quiere regresar la enfermedad vuelvo a mis herramientas, y en pocas semanas, puedo volver a estar bien, puedo recuperar mi vida…. En 30 años he tenido 7 recaídas que me han durado entre 3 a 5 meses, las ultimas, mucho más manejables. ¡Cuando estoy en crisis tengo otra personalidad, no soy yo!!, pero cuando salgo de ella, tengo mejor calidad de vida que, antes de que me diera, la crisis. Cada crisis me enseña algo, tiene un propósito.

¿PORQUE EL CAMBIO DE NOMBRE? NISSI significa el Señor está en mis luchas. Eso me recuerda, que estoy viva gracias a EL, Es un homenaje a mi PODER SUPERIOR. TORRES, es el apellido de mi madre, la mujer que sacrificó su vida por mi, para que nada me faltara. La enfermedad te llena de pensamientos negativos mentirosos. ahora quiero Honrarla y agradecerle.

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